EL BOSQUE AGRESTE
Anónimo
Debo ir por el bosque agreste
y sin rumbo he de errar,
con miedo y un terror cerval;
pues confié y fui engañado
uno es el que me ha traicionado.
De mi felicidad me han despojado
el fingimiento y el engaño,
yo que siempre honesto fui;
y quien sabe si ha de regresar,
pues por ese amor he de pagar.
Mi lecho será ahora un árbol de floresta,
los helechos me harán de almohadón.
Pues la dicha de mí ha escapado;
de mi propia vida huyo cada día
por un amor que tanto prometía.
De los frescos arroyos bebo
y de bellotas me alimento.
Pero tan sólo me complace
de tu belleza el fugaz recuerdo
pues por amor ya no estoy cuerdo.
4 comentarios:
Ojo con el tema bucólico, querido Kinky: Yo misma entré en ese mismo bosque (o parecido) y desde entonces ando asilvestrada por el mundo. Además, de tanto "vivir sin vivir en mí" me quedé tan flaca, febril y descangallada que aunque yo misma era un tango la gente me confundía con un elfo. Y luego, la dieta de bellotas y el lecho de helecho te dejan hecho una piltrafilla. Palabra de ermitaña.
Tenemos pendiente un café, un vino, una cerveza, otra conversación y un libro que he de regalarte. Te llamaré (aunque ya sabes que tardo en llamar) Un beso silvíboro.
vaya cursilada! me sorprendes, pensaba que eras más destroyer
Sofía, no seas tan dura con el Kinky!...que tará pasando una mala racha... o no?
Los bosques tienen mucha magia, son ideales pa perdese de vez en cuando....sigue caminando y ya verás como siempre hay un claro (braña o mayá) en el bosque. Y si te agobies mucho,sube a un picu y disfruta de la vista.
proverbio chino: "Si te sientas en el camino ponte de frente a lo que aún has de andar y de espaldas a lo ya andado".
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